El subsecretario de Pesca, Fernando Marcos, detalló las acciones implementadas por el Gobierno Provincial para acompañar a los trabajadores y empresas ante el complejo escenario que enfrenta la actividad pesquera, especialmente en Puerto Deseado.
Ante la crítica situación que atraviesa la pesca del langostino, el Gobierno de Santa Cruz, a través de la Subsecretaría de Pesca, conformó una mesa de trabajo con gremios y empresas del sector para abordar alternativas que permitan sostener la actividad y proteger las fuentes de empleo.
Fernando Marcos, subsecretario de Pesca, dependiente del Ministerio de la Producción, Comercio e Industria, en diálogo con LU12 AM830, explicó que si bien la resolución del conflicto depende del Gobierno Nacional, la Provincia ha tomado una serie de medidas para aliviar los costos operativos y dar respuesta a la flota tangonera. Entre ellas, se destacan:
- La reducción del 2,5 % en el precio del combustible.
- -La suspensión por cuatro meses del cobro por uso del puerto en Puerto Deseado.
- -La habilitación de un sector secundario para descargas.
- -El inicio de obras de reparación en los sitios 3 y 4 del puerto local.
Recientemente, el gobernador Claudio Vidal propuso ante el Consejo Federal Pesquero la suspensión de los derechos de exportación para la pesca de langostino, a fin de mejorar su competitividad. Como parte de las políticas de producción del Gobierno de Santa Cruz, es vital la recuperación óptima de los puertos.
“El precio del langostino cayó a la mitad respecto a los valores históricos, y hoy no resulta rentable para muchas empresas. Por eso, desde la Provincia estamos promoviendo el diálogo y tomando decisiones concretas”, sostuvo Marcos.
Ante el retroceso del langostino hacia el norte y el este del caladero, Santa Cruz impulsa una estrategia alternativa: revalorizar la pesca de merluza. “La merluza local es de muy buena calidad. Proponemos fortalecer su procesamiento en las plantas de Puerto Deseado y Caleta Paula, con estándares homogéneos, nuevos productos y certificación para posicionarla en mercados exigentes”, explicó el funcionario.
En 2024, Caleta Paula alcanzó un récord de desembarques y generó más de mil empleos directos vinculados a la merluza. “Queremos replicar ese modelo en Puerto Deseado, con mesas de trabajo permanentes, incorporación de mano de obra, capacitaciones y sostenibilidad a largo plazo”, aseguró Marcos.
Actualmente, las plantas de Puerto Deseado operan por debajo del 40 % de su capacidad. Por eso, la Provincia busca activar permisos y cuotas propias fuera de la jurisdicción provincial, sin afectar la Reserva Social, que para este año cuenta con una asignación de 20.000 toneladas de merluza.
“La pesca es clave para el desarrollo económico de nuestras localidades costeras. Acompañamos al sector con medidas concretas y sostenibles para que la actividad siga generando empleo y valor agregado en Santa Cruz”, concluyó.